Abrazadera para valla de malla
Este sistema de fijación es particularmente útil para rigidizar un cercado de obra uniendo entre sí las vallas de malla. Aún mejor, estos anclajes de fijación actúan como abrazaderas anti-vandalismo que impiden que cualquiera acceda al perímetro de los trabajos desplazando las vallas de malla.
La abrazadera de unión: para asegurar el cercado de una zona de obra.
La abrazadera de unión está compuesta por dos placas colocadas en paralelo y unidas mediante un tornillo con tuerca para el apriete. Cada uno de los extremos es redondeado para ajustarse a la forma del tubo vertical de la valla de obra. Esta abrazadera de sujeción es perfectamente adecuada para unir entre sí vallas de malla de acero galvanizado con tubos de 40 mm de diámetro. La instalación de abrazaderas sobre el cerramiento móvil de obra reduce notablemente el riesgo de vuelco de las vallas en caso de viento fuerte y disuade los intentos de intrusión. Nuestras abrazaderas de fijación para vallas de obra están fabricadas en acero galvanizado, con resistencia óptima y gran durabilidad.
¿Cómo instalar las abrazaderas de fijación para vallas de obra?
La instalación de la abrazadera para valla de obra es rápida y sencilla. Comience por montar el cerramiento alrededor del perímetro de su obra. Puede usar para ello dos tipos de bases de composición diferente: una base de PVC de 24 kg o una base de hormigón de 34 kg. Una base es suficiente para colocar dos vallas contiguas. Continúe con la instalación en toda la zona de trabajos. Una sola persona puede encargarse, ya que las vallas de obra pesan menos de 12 kg.
Una vez cercado el perímetro, puede ensamblar las vallas de malla entre sí colocando las abrazaderas una tras otra. Basta con desenroscar el tornillo y colocar la primera placa sobre el tubo vertical de las dos vallas situadas lado a lado. Luego coloque la otra placa por el lado opuesto y apriete firmemente. Y así sucesivamente.
Generalmente se recomienda fijar dos abrazaderas por valla de 2.000 mm de altura. Así, cada valla móvil de obra queda anclada a su vecina, garantizando una perfecta rigidez y una sujeción óptima.
